Son todos los evangelios, epístolas y otros fragmentos atribuidos en los cuatro primeros siglos a Jesucristo, sus apóstoles y sus discípulos que no fueron incluidos en el Nuevo Testamento autorizado. Contiene también los manuscritos sirios de las cartas de Pilato a Tiberio, etc., recientemente descubiertos. Están traducidos de las lenguas originales y contienen ilustraciones de antiguas pinturas y misales. La lectura de estos textos resultará sin duda interesante para todos aquellos que se sientan atraídos por el personaje de Jesús. Contiene también, entre otras, historias sobre la vida de María y distintas versiones de la Crucifixión.