El Hechicero es el artífice de las previsiones y de los maleficios. La palabra hechicería, procede del latín, "sortiarius", es decir, el que predice la suerte o bien el que "echa la suerte". La creencia en los poderes de los Hechiceros data de la mayor antigedad, y ha reinado en todos los pueblos bajo diferentes nombres, entre ellos el de "goecia". Existe una distinción absoluta entre los hechiceros y los magos que practican la alta magia, la magia blanca es muy diferente de la magia negra. Recordemos en efecto que en las lenguas del viejo Oriente las palabras "megh", "magh", de donde proviene el griego "magos" significan "sacerdote sabio excelente" y que el caldeo "maghim" se traduce por "alta sabiduría". El origen de sus nombres define pues un abismo entre la ciencia del ramo y los artificios del hechicero. El primero es de alta categoría: Estudia y no trabaja más que para el bien. el segundo es de baja estofa: Ni sabe ni puede obrar más que para el mal. Con la lectura de este libro, y gracias a la explicación detallada que en él no da el Mago Bruno, se pueden comprender claramente tanto los diferentes tipos de magia, como las distintas clases de Hechiceros y Conjuros por ellos utilizados.