Aunque frecuentemente se les confunde con los vegetarianos, hay sensibles diferencias entre ambas modalidades. Aparte de no consumir carne animal, tampoco consumen ningún tipo de alimento procedente de estos. Además, poseen una cuestión ética en cuanto a sacrificar animales para el consumo humano, pues consideran que los animales, hablando jerárquicamente, están al mismo nivel que el ser humano, no en un escalón inferior. Insisten en que todos los seres vivos están al mismo nivel y tienen los mismos derechos, por lo que, además de la dieta, los veganos adoptan un estilo de vida consecuente. Su dieta está basada sobre todo en verduras, frutas, frutos secos, semillas, aunque ello no les impide reunir todas las proteínas, vitaminas o carbohidratos que necesita su organismo sin recurrir a ningún producto de origen animal; simplemente han de tener una atención especial. Cualquiera que sea la razón para elegir una dieta vegana, es importante saber exactamente lo que esta decisión puede hacer para su cuerpo pues, si bien es probable que note muchos cambios positivos, también es importante estar al tanto de los riesgos.