Es difícil imaginar que en el Estadio Nacional en septiembre de 1973 alguien pudiera escribir poesía y además, se las arreglara para conservarla. Sin embargo sucedió. Y paso no solo en ese campo de prisioneros, sino también en el Estadio Chile, en isla Dawson, en Chacabuco y en otros centros de reclusión que surgieron inmediatamente después del golpe de Estado. Esta obra reúne poemas que describen lo que sucede inmediatamente después del golpe: poemas de prisión, los que hablan del exilio y finalmente aquellos que se refieren a las experiencias de estar "libres" bajo un régimen dictatorial.