Buenos Aires, 1947. Creció en Villa Crespo. Pasó sus veranos en Pergamino. Estudió en el Nacional Bartolomé Mitre. Con poco más de veinte años viajó a dedo por Sudamérica, trabajando de lavacopas o mozo, lo que le permitió hacer más de 20.000 kilómetros por Europa a bordo de un escarabajo. Volvió a la Argentina a principios de los 70. Alcanzó a darle un beso a Pichuco, a tratar de recibir a Perón en Ezeiza y a ayudar a Borges a cruzar la calle Paraguay. Redactor publicitario; después, dueño de su propia agencia. Publicó diversos cuentos. El foco absoluto es su primera novela.